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  • Lápices acuarelables: un medio artístico que une sensibilidad y precisión

    Una de las técnicas más atractivas para los amantes de la pintura, tanto aficionados como profesionales, es la acuarela. La textura, la transparencia y la delicadeza de sus colores proporcionan a los trabajos hechos con este medio una sutileza y sensibilidad difíciles de obtener con otros medios.

    Sin embargo, muchas personas no se acercan a esta técnica artística porque tiene fama de ser la más difícil de todas, puesto que requiere cierta habilidad en el uso del pincel y no admite errores (lo que se ha pintado no se puede borrar ni raspar). Además, la pintura a la acuarela requiere el dominio en el uso del agua, elemento que si no se maneja con cuidado puede provocar incómodos “accidentes”, especialmente si el artista es un niño pequeño.

    Conscientes de estas limitaciones, en las primeras décadas del siglo XX, los principales fabricantes de lápices y materiales artísticos crearon el lápiz acuarelable. Se trata de un lápiz de color soluble en agua. Este invento posee las características de ambos medios (lápiz y acuarela), de manera que ofrece una versatilidad de usos sencillamente impresionante. Su aspecto es prácticamente idéntico al de un lápiz de color, con un cuerpo de madera y una mina que contiene pigmentos solubles en agua (también existen gamas de lápices que consisten solamente en barras de pigmento). La gama de colores que ofrecen los lápices acuarelables coincide con las tonalidades de la acuarela en formato clásico y permite trabajar perfectamente sobre papel para acuarela.

    El uso de los lápices acuarelables combina la versatilidad de la acuarela con la facilidad de manejo y la precisión del lápiz de color. Puede trabajarse en seco o en mojado, y permite aplicar siguiendo una variedad de técnicas, bosquejo, sombreado, cubrimiento:

    • Crear un dibujo en seco sobre papel seco y mojarlo posteriormente con un pincel húmedo.
    • Seguir la misma técnica anterior, pero mojando solamente las partes que convengan.
    • Mojar el papel y trabajar sobre éste (“seco sobre mojado”).
    • Mojar la punta del lápiz en un vaso de agua antes de dibujar.
    • Trabajar sobre mojado, dejar secar y retocar en seco.
    • Esparcir trozos pequeños de raspado de mina sobre una superficie de color mojada para crear efectos extraordinarios.
    • Crear nuevas tonalidades y degradados utilizando un trapo seco o húmedo.

    Estas y otras técnicas son combinables entre sí, de modo que resulta extremadamente fácil pasar de una a otra. Esta flexibilidad hace que los lápices acuarelables sean uno de los recursos favoritos entre los artistas del dibujo, entre otras cosas porque permite satisfacer con inmediatez a los impulsos creativos y comprobar pronto el resultado de los sus trabajos.

    Además, el uso de los lápices acuarelables presenta numerosas ventajas adicionales, tanto por lo que respecta a su uso como por las posibilidades expresivas que ofrece:

    • Se trata de una técnica especialmente adecuada para principiantes que no dominan el medio pictórico o el uso del pincel.
    • Resulta una técnica ideal para los niños, por su facilidad de uso y porque ensucia menos.
    • Admite una gran cantidad de efectos, desde las transparencias de la acuarela clásica hasta el dibujo más preciso.
    • Se puede combinar el uso de lápices con la acuarela clásica en barra o pastilla y pincel, utilizando ambos medios en la misma obra (muy útil para pintar fondos).
    • Los artistas partidarios de resaltar los contornos tienen la posibilidad de hacerlo a la manera clásica de la acuarela, con tinta no soluble en agua, o bien utilizando los mismos lápices acuarelables en seco y crear interesantes efectos de difuminado.
    • Los juegos de lápices son más fáciles de mantener y transportar que las cajas de acuarelas (en pastilla o tubo).
    • Son muy prácticos para trabajar al aire libre, permiten hacer esbozos en seco y completarlos cómodamente en casa aplicando agua.
    • La relación existente entre calidad/precio es excelente.

    Estos motivos son más que suficientes para que esta técnica se haya convertido con el paso del tiempo en una de las preferidas para una gama amplia de aficionados y de artistas, especialmente en el ámbito del cómic, la ilustración editorial o la publicidad. También goza de mucho reconocimiento y prestigio en el campo de la ilustración técnica y científica (botánica, arquitectura, etc.).

    Las más prestigiosas marcas de lápices ofrecen entre sus productos juegos de lápices acuarelables, a menudo disponibles en varias calidades según el destinatario: calidad escolar, académica y profesional. En definitiva, se trata, de una técnica muy recomendable por su acceso, comodidad, facilidad de uso y riqueza de posibilidades expresivas.

    Archivo: Bellas Artes/Manualidades

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