Schneider, más allá de su propia planta de producción

El cambio climático es uno de los mayores desafíos del siglo XXI. Las empresas pueden hacer una importante contribución a la protección del clima. La empresa alemana Schneider es consciente de ésta responsabilidad. La protección del medio ambiente está anclada en la política de la empresa y llevándose a cabo desde hace muchos años.

Desde hace más de 15 años Schneider está certificada de acuerdo con las estrictas normas mundiales de sistema de administración medioambiental, la auditora ecológica europea EMAS.

Durante este tiempo Schneider ha invertido constantemente en la reducción de emisiones CO2 en todas las áreas de la empresa.

EMAS obliga al cumplimiento de sus requerimientos altamente estrictos incluso más que, por ejemplo, la ISO 14001. El desempeño medioambiental y sus políticas deben ser publicadas en una declaración medioambiental y puesta a disposición pública.

El objetivo es un proceso continuo de mejora (CIP) en la actuación medioambiental, tomando en cuenta factores ambientales directos e indirectos. En relación con la cantidad de productos Schneider ha podido reducir la cantidad de emisiones en 80% en los últimos 10 años.

Esto se logró, sobre todo a través de un enorme ahorro de energía y el cambio de la electricidad procedente de la energía hidráulica y solar. Las plantas de producción del fabricante de instrumentos de escritura Schneider se encuentran entre las más avanzadas en términos de protección del medio ambiente y las potenciales emisiones reducibles se han agotado a nivel local.

Ya que Schneider ha tomado muchas medidas dentro de sus plantas de producción, quiere ampliar sus ajustes a lo largo de la cadena de valor. Para facilitar esto ha acudido al especialista y proveedor de soluciones de negocios para la protección del clima, Climate Partner, que apoya a las empresas de todos los sectores para implementar la protección del clima de forma voluntaria.

¿De dónde vienen las emisiones? El cálculo de la denominada huella de carbono Corporativa

Junto con Climate Partner, Schneider ha calculado la llamada huella de carbono corporativa de toda la empresa. La huella de carbono es un indicador que, a través de un inventario mide la producción de gases efecto invernadero (GEI) generado por las diferentes actividades de la empresa, que derivan de la producción de energía, quema de combustibles fósiles (como el carbón, el petróleo y el gas natural), generación de metano por los residuos generados y otras actividades productoras de GEI.

El cálculo de la huella de carbón sin embargo no solo incluye lo que pasa dentro de las “cuatro paredes” de una empresa, sino también integra la adquisición de materias primas, el transporte, cualquier servicio, viajes de negocios, viajes del personal, etc. Basado en el cálculo de la huella de carbón, Schneider pudo ver que el 75%, y por lo tanto la mayor parte de las emisiones resultantes de materias primas y servicios comprados. El primer objetivo es ahora minimizar éstas emisiones, es decir, ver si se pueden reducir.

Derivado de la huella de carbono corporativa, y a través de un software especial y la base de datos almacenados, es posible calcular las emisiones que causaron los productos individuales.

¿Qué se puede hacer con las emisiones que no se pueden evitar?

Por supuesto es utópico creer que se pueden evitar todas las emisiones de una empresa.

Sin embargo, se pueden compensar.

Dado que las emisiones de gases de efecto invernadero se extienden uniformemente en la atmósfera, el clima se beneficia igual, si el CO2 se ahorra en algún lugar no solo en el punto donde se origina. Mediante el apoyo a proyectos de protección del clima se puede lograr la compensación.

La serie Slider certificada como climáticamente neutra

Desde septiembre de 2014 Schneider compensa las emisiones causadas por la producción de la serie Slider apoyando un proyecto de protección medioambiental en la eficiencia energética en Renania del Norte-Westfalia. Este proyecto no hubiera existido sin el apoyo y la financiación de Schneider. A base de esta compensación, la empresa Climate Partner certifica la serie Slider como climáticamente neutra. Además de los consumidores con conciencia ecológica, la nueva oferta se dirige principalmente a las empresas que quieren implementar su estrategia de cambio climático y la “Green Office”.

Para más información: www.schneiderpen.es